La combinación de la bomba de calor con energía solar se ha convertido en uno de los sistemas más eficientes para climatizar viviendas y negocios, consiguiendo a la vez una mayor independencia energética. Además, tanto si los paneles son térmicos como fotovoltaicos, se puede conseguir un ahorro significativo en la factura eléctrica. 

Bomba de calor y energía solar térmica

La combinación de placas solares térmicas y bomba de calor es una forma muy rentable de proporcionar agua caliente sanitaria y calefacción a la vivienda, sin generar un consumo elevado de electricidad proveniente de la red eléctrica pública.

Bomba de calor y energía solar fotovoltaica

Este tipo de instalación genera gran parte de la electricidad que necesita una bomba de calor para funcionar. Además se puede apreciar una ventaja significativa si la comparamos con los paneles térmicos, ya que mientras que con los paneles fotovoltaicos es posible aprovechar el excedente energético en otros electrodomésticos de la casa o devolverlo directamente a la red, la energía térmica sólo puede utilizarse para calentar el agua.

Ventajas de combinar bomba de calor con energía solar

• Reduce la huella de carbono. Utilizar la energía solar para calentar agua reduce la dependencia de otros sistemas que emplean combustibles fósiles. Esto ayuda a minimizar la emisión de gases contaminantes a la atmósfera.
• Energía gratuita e inagotable. La energía solar es 100% gratuita e inagotable por lo que podemos abastecernos de por vida y amortizar la inversión inicial que supone tanto a corto como a largo plazo.
• Mantenimiento simple. Tanto la bomba de calor como el sistema de energía solar requieren de un mantenimiento mínimo y muy sencillo. Además la vida útil de estos equipos suele superar los 25-30 años.
• Subvenciones y ayudas. De cara a favorecer la transición ecológica, todos los años se destinan fondos por parte de las diferentes administraciones públicas para que la instalación de estos sistemas renovables sea más asequible.
• Amortización. Lo normal es que el periodo de amortización para este tipo de equipos ronde los 5-8 años desde su instalación. Aunque, desde que se empiezan a utilizar se puede observar una reducción en la factura eléctrica, por lo que su rentabilidad resulta muy atractiva.
• Revalorización. La instalación de este sistema combinado hace que la vivienda alcance un valor más alto en términos de autosuficiencia.